"Máquina de escribir" de Héctor Iván González, Coordinador de “La Escritura poliédrica. Ensayos sobre Daniel Sada”, Becario del Fonca en el Género de Novela. Esta es su publicación de crítica, creación y reseñas.

martes, 9 de junio de 2009

Fernando del Paso ingresa a la Academia Mexicana de la Lengua: Alegría y azoro


¿Pueden experimentarse dos emociones, en apariencia, contradictorias simultáneamente? ¿Es posible sentir uno de los placeres más grandes al mismo tiempo que el azoro nos invade? Es el tipo de preguntas que me hago en seguida de haber escuchado la noticia de que Don Fernando del Paso ingresará a la Academia Mexicana de la Lengua. Esta mezcla de emociones dimana de la incredulidad que me causa el saber que el maestro Del Paso no es miembro de esta institución desde, por lo menos, unos treinta años. Y es que pensar en la prosa de Fernando del Paso es pensar en un bosque infinito donde todo tipo de flores se dan lugar, pensar en su capacidad de síntesis es pensar en uno de los conocedores más grandes de la historia de Occidente. Cómo es posible que Fernando del Paso no sea parte desde hace muchos años de esta Academia si él ha trastocado el lenguaje convirtiendo la ceniza en hielo y el agua en aceite. Cómo es posible que uno de los novelistas más importantes de México (de todos los tiempos) no haya sido invitado a una institución donde el lenguaje tiene un lugar primordial.
Ayer, precisamente, que estaba buscando un fragmento en específico en Les trois Mousquetaires 20 ans après de Alexandre Dumas, inevitablemente, recordaba la manera de narrar de Del Paso, veía como en él se continuaba la maravillosa manera de narrar, la forma de tejer las mejores páginas de Dumas. Era sorprendente que, en casi doscientos años haya surgido en México y no en Francia el continuador de la máxima expresión de la novela: la novela histórica. Y que, al leerlo en obras como Noticias del Imperio (1987), uno pueda disfrutar de muros de imaginación adosados con pilares de lenguaje poético.
Además, de todo este talento novelístico, su poesía. Pues Poemar (2005) es uno de los máximos libros que han salido de la imprenta del FCE en los últimos años. En él hay un homenaje a los marinos que nutrieron las historias de los siglos XVIII y XIX. Pues, así como se hace oprobio de las monarquías en Noticias del Imperio, de la misma manera, Del Paso teje y entreteje argumentos, cita nombres y datos y va entregando poco a poco una línea precisa del pensamiento: una línea muy fina que es el espíritu recorriendo la historia del mar.
Así es, alegría y azoro son las dos emociones que me inundan en estos momentos, un alegría profunda porque uno de los más grandes narradores vivos ingresará este jueves a la Academia Mexicana de la Lengua y un indescriptible azoro porque esto no se haya dado unas cuantas décadas antes.
Personalmente, siento un gran deleite al haber leído varios de sus libros, qué hambre de devorar todas sus obras. Particularmente, además de su narrativa, recomendaría aquel tomo de “Ensayos y obra periodística”, editado por el FCE, o el libro de ensayos acerca de El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha: Viaje alrededor de El Quijote.

1 comentario:

Lázaro Salvatierra dijo...

Caballero:
Siempre con el enorme deleite de leerlo.
Te cuento que hace un mes me reventé Máximas mínimas de Maximiliano. Aun cuando únicamente la introducción es Del Paso fue un bálsamo leer esa parte.
Un abrazo cósmico.